175 aniversario de la República Dominicana, tierra bendecida!!
Que viva la República Dominicana |
Hoy los dominicanos conmemoramos con orgullo y alegría el 175 aniversario de nuestra Independencia Nacional, y la fecha en que nuestro Pabellón tricolor se izó por primera vez con orgullo patrio. Celebramos y agradecemos a Dios por haber sembrando la semilla de la libertad en nuestros Padres de la Patria y esos hombres y mujeres valientes que sacrificaron todo por legarnos una nación libre.
Damos gracias a Dios porque esa semilla dió frutos y en los momentos en que nos hemos visto amenazados, hemos tenido a un Gregorio Luperón, Ulises Francisco Espaillat, Gaspar Polanco, Santiago Rodríguez, así como muchos otros en nuestra historia reciente.
Hoy más que nunca debemos atesorar el amor por la patria y estar alertas para salvaguardarla, hoy más que nunca debemos defender la institucionalidad y el apego a la Ley, y ondear con orgullo patrio nuestra bandera tricolor, atesorando los ideales patrios y emulando lo que ella significa.
Aquí les comparto las letras del poema dedicado a nuestra Bandera en esta importante fecha para todos los dominicanos, esperando quede sellado en cada uno de nosotros los valores patrios que entraña.
Arriba El Pabellón
Tercien armas ¡como quiera! El acostumbrado estruendo;
ello es que el sol va saliendo, y hay que enhestar la Bandera.
Enfilado pelotón de la guardia soñolienta,
al pie de asta, presenta arbitraria formación.
Y,hechas a las dos auroras, en que cielo y Patria están,
pasan de largo a su afán, las gentes madrugadoras.
Ni ven el sol de la raza, cuyos colores lozanos
tremolan entre las manos del ayudante de plaza;
ni del lienzon nacional, fijo ya a delgada driza,
recuerdan que simboliza toda una historia inmortal.
Pues cada matiz encierra lo que hicieron los mayores
por el bien y los honores y el rescate de la tierra.
El rojo, de su graciosa decisión habla al oído
-¡Soy- dice el laurel teñido con su sangre generosa!
Es el azul de su anhelo progresista clara enseña
color con que el alma sueña cuando sueña con el cielo.
Al blanco póstumo amor de su entrañas, se aferra;
dar por corona a la guerra el olvido redentor.
¡Presenten Armas!…. ya ondea el pabellón, y se encumbra
bajo el sol, que deslumbra y al clarín, que clamorea.
Ladra un can, el estridente sonido sobresaltado;
arde en armas el prado rompe en trinos el ambiente.
¡Que linda en el tope estás, dominicana bandera!
¡Quien te viera, quien te viera más arriba, mucho más…..!
Gastón Fernándo Deligne.