La preservación de 6,100 plantas endémicas de Quisqueya

Como una ciudadana preocupada por la preservación de nuestro medio ambiente y por el accionar en pro de enfrentar el cambio climático, comparto estas informaciones del director general del Jardín Botánico Nacional, el biólogo Ricardo García, al participar en el Almuerzo de Multimedios del Caribe, quien reveló que de las 6,100 especies endémicas de plantas que hay registradas en la isla, más de 2,000 pudieran haberse perdido. Expresó que entre las amenazas que penden sobre las plantas endémicas está la introducción de especies foráneas, ya como experimentos en la producción o en las reforestaciones que se hacen sin tomar en cuenta la flora y la fauna de la zona donde se van a sembrar los árboles. 

Entre las especies que están en serios peligro de perderse, citó el caso de la Canelilla, que se produce entre los municipios de Oviedo y Pedernales, y que sirve de base para la fabricación de la mamajuana, bebida que dijo se considera una marca-país.

No obstante, dijo que el Jardín Botánico ejecuta un programa dirigido a la preservación de la Canelilla, y que en la actualidad se ha logrado un 90% en la germinación de su semilla.También el Grupo Jaragua trabaja en la preservación de dicha plata, lo que augura un buen futuro para su preservación.

Igualmente citó el Cacheo, del que se produce el mabí del mismo nombre, y el Guaconejo, de la que se extraen aceites exquisitos usados en la elaboración de perfumes, y que actualmente tiene una gran demanda.Sobre el Cacheo dijo que el peligro radica en que para la fabricación del mabí hay que cortar la planta de raíz, con el inconveniente de que quienes la cortan no se preocupan en plantarla de nuevo.

Con respecto al Guaconejo, planta familia del limón y la naranja, señaló que por ser una productora de aceite para perfumería, la reserva que había en territorio haitiano fue eliminada por la industria, la cual tiene sus ojos puestos en la reserva dominicana.

“En los últimos años se ha estado explotando de manera desconsiderada y actualmente tiene algún grado de amenaza; están secando los árboles para llevárselo”, dijo.

Dijo que la mayoría de las especies que se pudieran haber perdido corresponden a Haití, país que apenas conserva un 3% de cobertura boscosa, mientras que la República Dominicana conserva un 40%.

Ricardo García aseguró que la ejecución de muchas jornadas de reforestación dañan de manera sensible la foresta y la fauna no solo del país, sino de la isla.

Dijo que dichas jornadas no toman en cuenta la gran variedad de especies endémicas que pueden existir en las zonas reforestadas, por lo que al plantar otras distintas se daña la ecología del lugar e, incluso, la fauna, ya que los animales propios del lugar pueden no tener a los árboles plantados como fuentes primarias de su alimentación.

El peligro con la reforestación proviene del hecho de que en las zonas reforestadas se introducen especies foráneas que se convierten en un verdadero problema para la flora criolla.

Puso como ejemplo la calandria roja, el lino criollo o granolino, la acacia y la poma roja, de las que dijo son especies invasoras que impactan el medio ambiente a veces hasta de forma catastrófica.

De la poma roja señaló que ha desplazado especies endémicas que se producen a las orillas de los lagos, trayendo consigo insectos y plagas que al final se convierten en un problema para la agricultura.

“Es por esto que hay que hacer todo lo posible por conservar las especies que son endémicas de la isla”, precisó.